¿Qué hacer durante la instalación de un elevador si hay un huracán en camino?
Si estás en medio de la instalación de un elevador y se pronostica la llegada de un huracán, hay que realizar una serie de pasos preventivos:
Revisión del cubo: Antes de que el huracán toque tierra, se debe hacer una revisión exhaustiva del cubo del elevador para asegurar que esté bien cerrado y protegido contra la entrada de agua o escombros.
Asegurar los tapiales: Asegura que todos los tapiales alrededor de la instalación estén firmemente sujetos para evitar que sean desplazados por el viento o la lluvia.
Protección de materiales y herramientas: Si la bodega donde se almacenan los materiales y herramientas está en una zona de riesgo de inundación, es recomendable calzarlos con tarimas para elevarlos del suelo. Si es posible, reubica los materiales y herramientas a una zona con menor riesgo de inundación.
¿Cuáles son las medidas de prevención y cuidado para un elevador durante un huracán?
Para proteger un elevador ya instalado antes de la llegada de un huracán, sigue estos pasos:
Posicionar la cabina: Lleva la cabina del elevador al último nivel. Esto no solo protege la cabina, sino que también evita posibles inundaciones en los niveles inferiores.
Apagar el interruptor principal: Una vez que la cabina esté en la posición correcta, apaga el interruptor principal del elevador para dejarlo fuera de servicio. Esto previene daños eléctricos en caso de inundación o falla del suministro eléctrico.
Promueve la seguridad en caso de un huracán.
¿Qué hacer si mi elevador tuvo afectaciones durante un huracán?
Después de que el huracán haya pasado, se debe de realizar una inspección detallada del elevador antes de volver a ponerlo en funcionamiento:
Revisar si el equipo se mojó: Verifica si alguna parte del elevador se ha mojado durante la tormenta. Si es así, no intentes encenderlo de inmediato.
Esperar el tiempo adecuado: Deja que el equipo se seque por al menos 72 horas. Este tiempo de espera es fundamental para evitar daños mayores, como cortocircuitos, que podrían comprometer la seguridad y funcionalidad del elevador.
La prevención es la clave para minimizar los daños que un huracán puede causar a un elevador en proceso de instalación o ya instalado. Siguiendo estos pasos, puedes proteger tu equipo y asegurar que, una vez pasada la tormenta, el elevador pueda volver a funcionar de manera segura y eficiente. Recuerda que la seguridad siempre debe ser la prioridad número uno en situaciones climáticas extremas.